La jornada deja una sensación extraña en el Barpimo Futsal Alhendin

GABINETE

Sabor agridulce ha dejado el enfrentamiento de los juveniles de división de honor con el Córdoba Stilo Textil

Si comenzamos la crónica indicando que los locales tuvieron aproximadamente un 80 % de posesión de balón, que lanzaron a puerta unas veinte veces, que dieron cinco palos y que el contrario tan sólo tiró a puerta ocho veces, cinco de ellas entre los tres palos, confundiríamos a aquel que no vio el partido en vivo.

Para aclarar la situación habría que aportar un solo dato más. La efectividad de los locales cara a portería fue del 10 % y la de los visitantes del 90 %.

El juego de los cordobeses está basado en un orden defensivo sobresaliente, agazapados tras la línea de medio campo y entregando la pelota al contrario. A partir de ahí solo resta esperar el error del contrario para salir a la contra con las ideas muy claras. El balón no lo quieren porque no están cómodos con él, eso sí a no ser que sea un balón a la contra.

Esta táctica colapsó el alegre juego al que nos tienen acostumbrados nuestros juveniles hasta llevarlos a encajar tres goles en cinco minutos cuando hasta ese momento ellos ya habían dado cuatro palos y tirado a meta once veces.

A vuelta del descanso los del BARPIMO salieron decididos a por el partido y consiguieron poner en el electrónico un 2-3 esperanzador. Pero esto no inquietó lo más mínimo a los cordobeses que, siguiendo a lo suyo, anotaron por dos veces más ante un Alhendin a la desesperada con juego de cinco.

No hay otra cosa que seguir trabajando para seguir demostrando que

CUMPLIMOS SUEÑOS, FORMANDO PERSONAS.